Níjar, cuyo término municipal se encuentra en el extremo sur-oriental de la provincia de Almería -y por lo tanto también en el extremo sur-oriental de España-, durante la Edad Media quedó al margen de las poblaciones y rutas comerciales importantes de Al-Ándalus. No obstante, y con unos 63 kms de costa, pronto vio cómo a lo largo de ella se fueron levantando las primeras torres y fortificaciones defensivas y de vigilancia.
De entre sus muchos edificios de interés (en el año 2022 contaba con un total de 156 construcciones catalogados Bienes de Interés Cultural repartidos por todo el municipio), en el núcleo de Níjar destacan algunos como la iglesia parroquial de Santa María de la Anunciación, situada en la zona más elevada del pueblo, presidiendo el caserío de su casco histórico. En el momento de su construcción quizás se hallaba a las afueras de su núcleo urbano, junto a una inicial torre-fuerte, aunque a partir de su edificación vendría a configurar una nueva trama urbana. La iglesia pertenece al conjunto de las que se levantaron en Almería durante la repoblación cristiana y tras los intentos de asimilación y expulsión posterior de los moriscos
Esta iglesia fue construida en el año 1560 en tiempos de D. Antonio Corrionero, obispo de Almería, aprovechando la existencia de una torre-fuerte de planta rectangular de tres pisos, cuya fachada queda presidida por el escudo del emperador Carlos V, y que pasó a convertirse en el actual campanario de la iglesia. Construida con una doble función religiosa y defensiva, su decoración general queda reducida a simples molduras que marcan la línea de impostas, predominando en todos sus muros los paramentos lisos.
En su construcción se distinguen tres etapas. Durante la primera, la iglesia se construye en 1560 con una sola nave y adosada a la torre-fuerte. Esta primera iglesia tenía planta rectangular “de cajón”, con coro a los pies, capilla Mayor abierta tras un arco toral que apoyaba en pilares poligonales y cubierta de armadura mudéjar rectangular con labores de estrella de ocho puntas y lazos. La segunda corresponde a los años 1673-1674, cuando se amplía el templo, alargándolo y construyendo las dos naves laterales, quedando tal como hoy se puede ver. Por último, en una tercera fase, en 1761, se vuelve a ampliar, aunque no se tienen noticias de las obras realizadas, que pudo ser quizás sólo el cuerpo de campanas de la torre.
Bien de Interés Cultural desde 1985, lo más destacado de esta iglesia es su citada torre, concebida como torre-fuerte, con dos cuerpos bien diferenciados: el inferior, un gran volumen rectangular, robusto, con pocos huecos en fachada y un interior abovedado; y el superior, construido en ladrillo como cuerpo de campanas para la iglesia. Con cuatro frentes, uno de ellos cegado por una espadaña y reloj, este segundo cuerpo se corresponde con un añadido del siglo XVII sobre la torre-fuerte inicial, que se muestra coronada por matacanes en todo su contorno, y presidida por un escudo con águila, símbolo del emperador Carlos.
Foto: ANE (Wiimedia Commons)
Bibliografía:
* Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico
