Moguer, tras la ocupación militar en tiempos de su reconquista por Alfonso X El Sabio (1262-1264), es designada aldea de Niebla hasta el año 1333, en que se produce su separación definitiva al conceder el rey Alfonso XI la aldea de Moguer en señorío a Alonso Jofre Tenorio, Almirante Mayor de Castilla.
La emigración y las expediciones a América tuvieron aquí un atractivo sin precedentes, ya que muchos moguereños se alistaron en las armadas de la Carrera de Indias a lo largo de los siglos XVI y XVII, provocando el enriquecimiento del municipio y reforzando aún más sus relaciones comerciales y marítimas; enriquecimiento que culminó con la concesión del título de Ciudad para Moguer, por el rey Felipe IV, en el año 1642.
Entre sus edificios importantes impulsados por estas circunstancias, destaca esta enorme iglesia parroquial, considerada el mayor templo de la provincia de Huelva. Es también de los más representativos del barroco sevillano en tierras onubenses, con notable aspecto catedralicio, y está dedicada a Santa María de la Granada, cuya imagen preside la iglesia bajo baldaquino, en el centro del presbiterio.
La construcción de esta iglesia se debe a la maestría de José Álvarez, Maestro Mayor del Arzobispado de Sevilla, que la dirige a partir del año 1776, con planta de cruz latina, con cinco naves y amplia cúpula sobre el crucero.
Destaca al exterior su bella fachada principal (en la imagen), levantada toda ella de ladrillo con elegante diseño geométrico, lógico y bien estructurado, donde resalta especialmente su portada, también en ladrillo y en dos cuerpos de altura. En las líneas de esta portada se conjugan sabiamente los trazos rectos de los elementos sustentantes (columnas pareadas de ladrillo en estilo dórico en el primer piso y columnas simples de orden jónico en el superior), con los elementos curvos formados por arcos, cornisas y frontones.
La torre de esta iglesia es anterior a ella, quizás obra del siglo XIV, y fue remodelada por el también arquitecto sevillano Pedro de Silva en 1760 como un referente a la Giralda de Sevilla. De ella es conocido el dicho de su vecino más universal, Juan Ramón Jiménez: “La torre de Moguer de cerca, parece la Giralda vista de lejos”. Pedro de Silva se encargaría, además, de la reparación de otras numerosas torres e iglesias de la zona, arruinadas tras el tristemente célebre Terremoto de Lisboa del año 1755, entre las que se citan las de La Palma del Condado, Zufre, San Pedro en Huelva, Valdelarco o la Asunción en Aracena.
Ubicada en el centro urbano de Moguer, catalogado como Conjunto Histórico desde 1967, esta iglesia constituye uno de los hitos más representativos de los denominados "Lugares Colombinos" que tanta importancia han aportado a nuestra historia nacional.
Foto: Carlos Ruiz Serrano
Bibliografía:
*Historia de la Arquitectura Española. Tomo 4: Arquitectura Renacentista. Editorial Planeta, año 1986.
* Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico