La localidad de Chiclana de Segura, reconquistada por Fernando III El Santo en torno al año 1235, llegó a ser cabecera de la encomienda santiaguista de Monzón-Chiclana, siendo su comendador durante un tiempo el célebre poeta-guerrero Jorge Manrique, uno de los trece del Capítulo dirigente de la Orden de Santiago.
La iglesia de San Pedro de esta localidad, se emplaza sobre una explanada ocupando el solar de una anterior iglesia medieval, un edificio creado en estilo toscano que se derrumbó en el siglo XVI y se volvió a levantar posteriormente en el mismo lugar ya en estilo renacentista, con una cronología que va desde los años finales del siglo XVI al primer tercio de la centuria siguiente.
Durante el siglo XIX varios graves sucesos dañaron a esta iglesia. Así, en el año 1811 fue incendiada por las tropas francesas, que dejaron el templo asolado y con numerosos retablos destruidos; en 1838 sufrió el acoso y la barbarie de las tropas carlistas; y en 1839 pudo ver cómo un huracán derribaba el chapitel de su torre.
Interiormente la iglesia se organiza a partir de una sola nave a la que se abren cuatro capillas laterales, con una iluminación que se ve acentuada a través de dos vidrieras ubicadas en las capillas laterales dedicadas a la Virgen de Nazaret y a San Pedro, de época actual.
Al exterior presenta dos portadas. La situada al Norte apenas tiene decoración; en ella destacan algunos pocos elementos arquitectónicos y está compuesta por un hueco con arco de medio punto y dos pilastras. La portada Sur, que es la principal y a la que se accede a través de una amplia escalinata, está compuesta por sillares de piedra y consta de un hueco acabado en medio punto enmarcado entre pilastras cajeadas que soportan un entablamento del que parte un frontón recto partido en cuyo centro se abre una hornacina entre finas pilastras; en dicha hornacina figura la imagen de su titular, San Pedro, patrono de Chiclana de Segura.
Pero quizás el elemento más significativo de la iglesia es su torre, alzada junto a la portada principal adelantada respecto al cuerpo de la iglesia y compuesta de dos cuerpos bien diferenciados: el bajo de planta cuadrada, robusto y de gran altura, y el alto separado del anterior por una suave cornisa, de planta octogonal con cuatro huecos donde se alojan las campanas, coronándose su conjunto con un chapitel que destaca en altura sobre el caserío del entorno. También destacan al exterior sus recios contrafuertes que le aportan al edificio la consistencia y solidez necesarias para su estabilidad.
De entre sus bienes muebles destaca la imagen de Nuestra Señora de Nazaret, patrona de la localidad, obra del siglo XVI de transición del gótico al renacimiento, y que en preside el altar Mayor.
Foto: 19 Tarrestnom65 (Wikimedia Commons).
Bibliografía:
*Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol en Chiclana de Segura. Diario de Jaén, 12 de mayo de 2021.
