La localidad de Hinojosa del Duque, en la comarca cordobesa de Los Pedroches, parece no haber sido ocupada antes de los tiempos de la Reconquista, apareciendo en el año 1445 como un lugar donado por don Juan II al maestre de Alcántara, Gutierre de Sotomayor.
Entre el caserío de la localidad destaca sobremanera su iglesia de San Juan Bautista, una obra que data de los años finales del siglo XVI, de planta basilical y tres naves separadas por pilares de granito sobre los que descansan los arcos desiguales que separan las naves. Los arcos del lado de la Epístola son apuntados y se apoyan en semicolumnas adosadas a los pilares, mientras que los del lado del Evangelio son de medio punto. En cuanto a las cubiertas, la nave central se cubre con armadura de madera; las laterales lo hacen mediante bóvedas nervadas; y la cabecera, que consta de un ábside central y dos laterales, todos planos, se cubren con bóvedas estrelladas. En la nave de la Epístola destacan la portada que da acceso a la Sacristía y el Baptisterio, esta última con una bella bóveda vaída decorada con círculos concéntricos.
Al exterior destaca su fachada de estilo plateresco, obra realizada por el célebre arquitecto Hernán Ruiz II El Joven, en la que pueden contemplarse los escudos de los Zúñiga y Sotomayor, así como un conjunto de tres ventanas armónicamente enlazadas y bellamente ornamentadas.
Pero especialmente interesante es su magnífica portada de acceso, una monumental obra iniciada en el año 1529 concebida como gran arco de Triunfo y al parecer concluida en 1571. Compuesta por tres cuerpos de altura, presenta su hueco de entrada acabado en arco de medio punto con arquivoltas de casetones y cabezas de ángeles sobre pilastras recamadas de grutescos. Este hueco se muestra enmarcado entre decoradas parejas de órdenes de columnas, alzadas sobre pedestales sobre las que corre un entablamento primorosamente decorado y se apoya sobre cartelas sostenidas por figuras de niños; una portada que constituye una de las mejores obras de este gran arquitecto, y de las más espléndidas del renacimiento andaluz.
La torre, elegante y espigada al igual que en otras iglesias de la sierra, sigue el tipo de las torre-fachada. En el año 1588 fue encargado de la construcción de este campanario Juan de Ochoa, quien lo concibe como un alto basamento de planta elíptica sobre el que se levantan tres cuerpos de base decreciente que sigue los esquemas de los Hernán Ruiz, padre e hijo; posteriormente sería otro integrante de la saga, Hernán Ruiz III, quien repetiría su mismo esquema serliano en la torre de la Mezquita-catedral.
Bien de Interés Cultural desde el año 1981, las proporciones y la monumentalidad de esta iglesia han hecho que sea conocida allí como "la Catedral de la Sierra”.
Foto: Fafaelji (Wikimedia Commons).-
Bibliografía:
*Historia de la Arquitectura Española. Tomo 3: Arquitectura renacentista. Editorial Planeta, año 1986.
*Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico.
*Parroquia de San Juan Bautista. En: hinojosaesturismo.es