La localidad almeriense de Mojácar se encuentra emplazada en la comarca del Levante Almeriense, a escasos cuatro kilómetros de la costa mediterránea. Pueblo de pequeña entidad, de unos 7.500 habitantes en el año 2022, su viejo núcleo urbano se alza sobre un terreno elevado a poco más de 150 m sobre el nivel del mar.
Perteneciente desde el año 2013 a la red de los Pueblos más Bonitos de España, entre su blanco caserío destaca su peculiar iglesia Santa María de la Encarnación, un bello ejemplar de iglesia fortificada, de las que aún se conservan algunas más en la provincia de Almería.
Situada en el centro de su casco histórico y construida en piedra de mampostería, la iglesia posee planta rectangular y está constituida por una única nave que se cubre con bóveda de cañón con arcos fajones que descansan en pilares cuadrados. Del cuerpo de la iglesia sobresale en altura la torre, formada por tres cuerpos, siendo el más alto de todos de ladrillo, abierto para campanas con huecos acabados en medio punto.
Esta iglesia históricamente servía como fortaleza contra los ataques que la población pudiera recibir. Situada en la parte superior de la población, se construyó hacia el año 1560 sobre el lugar que antes ocupara la antigua mezquita mayor. Asimismo en este mismo lugar se han localizado restos de un antiguo castillo árabe del siglo XIII del que aún se conserva un viejo aljibe y la Atalaya del Peñón, una torre islámica hoy declarada Bien de Interés Cultural. Esta antigua fortaleza, primero islámica y después cristiana, fue reconvertida al culto tras la Reconquista, cumpliendo la doble misión defensiva y militar.
Resulta evidente su sencillez, que guarda en su interior bellas pinturas al fresco realizadas en los años 60 del siglo XX por un pintor itinerante. La iglesia perdió su retablo Mayor durante los disturbios de la Guerra Civil, guardando hoy en su interior una pequeña colección de imaginería entre las que se incluyen las de San Agustín y la Virgen del Rosario, patrones de la localidad.
Al exterior muestra una portada simple en arco de medio punto con dovelas resaltadas y sobre ella una pequeña ventana y un hueco cuadrado ciego. En la fachada lateral presenta grandes contrafuertes para contrarrestar los empujes de la bóveda, lo que le da un mayor aspecto de fortaleza.
Bien de Interés Cultural desde el año 1985, durante el proceso de su restauración aparecieron tanto en el exterior como en el interior material cerámico de origen islámico y algunos enterramientos, así como fragmentos de terra sigillata en las excavaciones del recinto exterior.
Foto: Millars (Wikimedia Commons)
Bibliografía:
* Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico