La Alcazaba de Málaga se construye entre los años 1057 y 1063, en la zona oriental del recinto amurallado que servía de defensa de la ciudad, y cuya parte más alta corresponde al antiguo Castillo de Gibralfaro, con el que está unido a través de una estrecha coracha.
Quizás de origen romano, por el teatro que se asienta a los pies de su colina que haría las veces de Acrópolis y por los hallazgos realizados en la propia Alcazaba, está considerada por distintos autores como la fortaleza más importante de la España islámica, por sus accesos en recodo, sus recintos murados y por los vericuetos del trazado de sus murallas, consecuencia de un estudiado plan defensivo hasta el palacio del gobernador.
Residencia de reyes y gobernadores musulmanes y cristianos, se cree levantado por Badis-Maksan, luego complementado con nuevas estructuras, y engrandecido posteriormente hacia el año 1065 bajo el poder del reino granadino. Fortaleza de primera magnitud, los Reyes Católicos enarbolaron su cruz y su pendón en su Torre del Homenaje cuando se rindió la ciudad en 1487; dos siglos más tarde sería habitado por Felipe II (1624), y mucho después Carlos III ordenaría tirar parte de sus murallas.
Con hasta tres muros concéntricos que rodean el cerro donde se alza, cuenta con una entrada primera con acceso en zigzag, a partir del cual inicia un largo ascenso entre muros de mampostería y ladrillo, hoy cubiertos por una cuidada vegetación. En su interior aparecen distintos arcos o Puertas, generalmente de herradura, algunos apoyados sobre columnas con capiteles romanos que certifican la proximidad de las ruinas clásicas usadas por los musulmanes como cantera. Al primer recinto se llega a través del llamado Arco del Cristo, por haber sido usado como capilla durante años.
Allí aparecieron restos de muros romanos y pequeñas albercas excavadas en pizarra destinadas a la preparación del garum (pasta de pescado), y a la izquierda, en una zona llana desde la que se domina la ciudad se instaló tras la reconquista la artillería, por lo que se le conoce como Plaza de Armas, donde hay un jardín con alberca, y a continuación la Torre de la Vela, donde se instaló una campana tras la toma de la ciudad.
Tras la Puerta de los Arcos se accede a un tercer recinto donde está el palacio nazarí y un pequeño barrio de viviendas que data de los siglos XIII y XIV. En su parte central se halla la zona donde vivían reyes y gobernadores, en una arquitectura nazarí en cuyos muros de salas y habitaciones reconstruidos existen pequeñas alacenas que muestran fragmentos de cerámica islámica halladas en las excavaciones.
Bien de Interés Cultural desde 1931, la completa visión de sus murallas al final de la calle Alcazabilla, hoy peatonalizada, junto con el teatro Romano a los pies y el noble edificio del Museo de Málaga junto al Parque y el muelle a su lado, configura un espacio urbano, histórico, artístico y paisajístico único y muy difícilmente superable.
Foto: Carlos Ruiz Serrano
Bibliografía:
*Guías provinciales de España: Málaga. Revista Viajar, editorial Tania, S.A., Grupo Z, 1982.
