La fundación de la localidad cordobesa de La Carlota, en la comarca del Valle Medio del Guadalquivir, surge en el marco del Fuero de las Nuevas Poblaciones impulsado por el rey Carlos III con la ayuda de sus ministros ilustrados como el conde de Floridablanca, Gaspar Melchor de Jovellanos o Pablo de Olavide.
En efecto, por las nuevas corrientes del proceso renovador de dicho Fuero se llevaron a cabo en España importantes intentos de renovación siguiendo las tendencias de aquel Siglo de las Luces, y también uno de los experimentos sociales de mayor trascendencia creados en Andalucía. La fundación de aquellas Nuevas Poblaciones tenía un triple objetivo: la creación de una comunidad ideal de agricultores y artesanos que fuera ejemplo para el resto de Andalucía; la repoblación de territorios desérticos en zonas como Sierra Morena; y el aumento de la seguridad del paso por el Camino Real de Madrid hacia el sur.
Los primeros colonos extranjeros venidos de distintos países de Europa llegaron el 14 de octubre de 1768 para dar vida a La Carlota, que pronto levantó sus edificios representativos como el Palacio de la Real Intendencia (hoy Ayuntamiento), la Iglesia, el Mercado, la Cárcel y esta Real Posada, un importante edificio de transición del barroco al neoclasicismo, hoy con categoría oficial de Monumento.
Concebida para el servicio de viajeros, comerciantes y los animales precisos para la carga y el transporte de mercancía, la Real Posada es un amplio edificio creado con grandes dosis de organización y con la prestancia que requería una fundación real con vocación de modelo para la formación de toda una sociedad agraria regeneradora de avance económico y renovación.
El edificio fue creado en dos fases constructivas: el ala izquierda desde la portada de la fachada principal se acabó en 1769 para uso de hospedaje, y a final del siglo se añadió el ala derecha para la cría de ganado y almacenaje. Ambas zonas se armonizan y fusionan a pesar de su diferente distribución interna y las variantes formales en fachada, dando lugar a un gran conjunto de planta rectangular y en su origen exento.
De gran desarrollo lineal y un cierto aire mudéjar, en el centro de la fachada se encuentra la portada principal, en un cuerpo de mayor elevación, abierta en un gran arco que se abre a un patio alargado que conecta con la portada trasera.
Bien de Interés Cultural desde el año 2001, este noble edificio ha sido objeto de reformas y modificaciones tanto en interior como en fachada, y en la actualidad se distribuyen en él distintos usos culturales como la Biblioteca Municipal, la Casa de la Cultura o el Centro de Información Turística.
Foto:Ham68 (Wikimedia Commons)
Bibliografía:
. La Carlota. Real Posada. Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, en: guiadigital.iaph.es
. La Carlota. Breve reseña histórica. Web oficial del Ayuntamiento de La Carlota, en: lacarlota.es