También conocido como “Museo de Jaén”, se sitúa en la Avenida de la Estación, el eje de expansión más importante del Centro Histórico de Jaén, declarado Bien de Interés Cultural desde 1973. Su historia comienza en 1846 cuando se abre al público un Museo de Pinturas ubicado en el antiguo convento de la Compañía de Jesús, con fondos procedentes de las desamortizaciones, y del que solo conserva algunas pinturas de tema religioso.
En 1914 ya se creó el Museo Provincial de Bellas Artes de Jaén, ubicado en el palacio de la Diputación, obra de finales del siglo XIX del arquitecto Jorge Porrúa; pero al ser un espacio compartido y limitado, el político jienense José del Prado y Palacio promovió la compra de un terreno de 4.200m2 en el citado Paseo de la Estación para su nuevo y actual emplazamiento.
En 1920 se aprobó el proyecto de construcción de la nueva sede del Museo, cuyo edificio principal diseñado por Antonio Flórez Urdapilleta es un palacio de sabor clásico y planta cuadrangular con torres en las esquinas, donde se instalaron dos importantes portadas del Jaén renacentista: la del edificio del Pósito, obra de Francisco del Castillo, y la de la iglesia de San Miguel, atribuida a Andrés de Vandelvira, ambas del siglo XVI.
El edificio pasó por distintas vicisitudes durante su corta historia; así, a finales de los años veinte vio paradas sus obras, y en tiempos de la II República se quiso albergar en él la Escuela Normal de Magisterio. Tras la Guerra Civil el Ejército necesitaba un edificio amplio y pidió al director del Museo que dejara libre sus espacios haciéndose con él, con lo que se inició el llamado “Museo disperso” entre los años 1939 y 1969, cuando las colecciones fueron repartidas entre la iglesia de San Andrés y varios despachos y cajas de escaleras de la Diputación y del Ayuntamiento de la ciudad, siendo devuelto finalmente al Ministerio de Educación y Ciencia en la misma década de los 60.
La sección de Arqueología nació en 1963 a instancias del Instituto de Estudios Giennenses de la Diputación Provincial, fundándose después el Museo Arqueológico Provincial. Finalmente, el Provincial de Bellas Artes se fusionó con el Arqueológico Provincial, creándose el actual Museo Provincial de Jaén, abriéndose al público en 1974 en su emplazamiento actual, tras su readaptación por el arquitecto Luis Berges Roldán.
El edificio cuenta con dos secciones permanentes, la de Arqueología, con siete salas, dos entreplantas y un recorrido por la historia de la provincia de la Prehistoria, la era Hispanomusulmana y la Romana, en la planta Baja; y la de Bellas Artes, en la planta Alta, con nueve salas y especial presencia de autores jiennenses.
Bien de Interés Cultural desde 1929, este importante Museo cuenta con otros dos edificios también proyectados por Berges Roldán en los años 70, uno dedicado a Sala de Exposiciones Temporales y a la exposición monográfica del Conjunto Escultórico de Cerrillo Blanco de Porcuna, y el otro destinado a oficinas, biblioteca, talleres de restauración y almacenes.
Foto: Carlos Ruiz Serrano.
Bibliografía:
*Museo de Jaén. Consejería de Turismo, Cultura y Deporte, en: museosdeandalucia.es