El castillo de los Fajardo, de Vélez-Blanco, es un suntuoso castillo construido entre 1506 y 1515 por el Marqués de los Vélez, don Pedro Fajardo y Chacón, sobre las ruinas de una antigua alcazaba musulmana de la que aún se conservan lienzos de muralla, crujías, cimientos y la estructura de su aljibe bajo el patio.
También llamado Castillo-palacio de los Marqueses de los Vélez, constituye una de las obras renacentistas más bellas de las realizadas en nuestro país, y aún se yergue airoso dominando una espléndida vista y orgulloso de ser uno de los hitos arquitectónicos más representativos de la provincia de Almería.
El recinto en su totalidad contiene unos 2.300 m2 de superficie y corresponde al estilo gótico tardío con ciertos rasgos moriscos. Es de planta hexagonal alargada hacia el noreste y cuenta en el lado sur con el Patio de las Caballerías, que comunicaba con el alcázar por un puente levadizo protegido por muros y jalonado por dos extraordinarios arcos de piedra.
De este castillo-palacio destaca su Patio central y la impresionante mole de piedra que constituye su Torre del Homenaje, así como, rodeándola, otras dependencias anexas creadas para uso de la guardia del castillo, depósito de víveres, polvorín, etc.
Mención especial merece su Patio del Honor, una majestuosa obra en mármol blanco de Macael y una joya escultórica del arte del Renacimiento italiano en España, dada la procedencia de sus artífices, Francisco Florentín y Martín Milanés. Vendido –como otras piezas del edificio- en 1904, pasó a Nueva York, al Metropolitan Museum of Art, donde se instaló en 1964 procedente de un coleccionista particular. De 16 x 13,50 m de lado, cuenta con dos niveles: el inferior, contiguo al acceso, posee en el ala del mediodía una galería de arcos rebajados y moldurados sostenidos por columnas; debajo del patio está el aljibe, de época nazarí, excavado en la roca viva y dañado por el terremoto de 1531. En el piso superior, dos de sus alas poseen también galería, la de levante abierta en sus dos costados al valle velezano y al interior del patio.
También destaca la Sala del Triunfo, con acceso desde la galería y presidida por una chimenea de mármol. Con su artesonado en nogal, bajo el friso se representa la entrada triunfal del emperador Titus en Roma; al lado del carro triunfal se observa a una persona vestida a lo romano con el escudo de los Fajardo: es Don Pedro Fajardo, primer marqués de los Vélez. Posteriormente, su hijo don Luis Fajardo añadiría otro friso en los laterales de la sala con motivo de su victoria sobre los moriscos en la Guerra de las Alpujarras.
Bien de Interés Cultural desde el temprano año de 1931, unas bellas almenas troncopiramidales rematadas en esfera aumentan la originalidad y espectacularidad de esta singular construcción.
Foto: Felipe Ortega (Wiimedia Commons)
Bibliografía:
* Historia de la Arquitectura Española, Editorial Planeta, año 1986.
*Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico