El castillo de Montilla, ubicado al norte de la localidad, debió iniciarse con la elevación de una torre a la que rodeaba una muralla, a instancias de Gonzalo Yáñez Dovinal, I Señor de Aguilar por decisión de Fernando III el Santo, en recompensa por su apoyo durante la reconquista. Con el tiempo se fue ampliando hasta alcanzar una planta rectangular con torres en las esquinas para facilitar la visión del enemigo.
En el año 1375 el recinto fue ampliado de nuevo con la creación de una barbacana y una nueva línea de defensa, creándose en su interior una plaza de Armas y viviendas, donde nació en 1473 Gonzalo Fernández de Córdoba, luego conocido como El Gran Capitán.
La destrucción de este castillo fue promovida por el rey Fernando el Católico en 1508, deseoso como estaba de arrebatar el poder a la nobleza, por lo que aprovechó un desacato al I marqués de Priego para ordenar la demolición de lo que hoy probablemente sería el monumento más importante de Montilla.
Tras su demolición, las ruinas debieron ser una importante fuente de materiales para la población, entonces en crecimiento. Y sobre ellas en el siglo XVIII se construyó un alhorí o granero, un singular edificio de carácter utilitario, de fuerte fábrica y planta rectangular y cinco naves interiores, abovedadas en planta baja y con armadura de madera en planta alta. Conocido como el Granero del Duque de Medinaceli o simplemente el Granero del Duque, su muro perimetral se monta sobre los del antiguo castillo, aprovechando varias de sus torres y construyéndose entre 1722 y 1723 otras de nueva planta semejantes a las anteriores.
El edificio quedó en manos de la familia marquesal durante siglos, hasta que posteriormente fue vendido a particulares. Después de la Guerra Civil española (1936-39) pasó a depender del Servicio Nacional del Trigo, hasta que fue adquirido por los García Cobos, que lo tuvieron en propiedad hasta el año 1999, cuando fue comprado por el ayuntamiento de Montilla.
Desde el año 2008 el alhorí del Castillo ha estado abriendo sus puertas en distintos momentos puntuales, para acoger actos como el de la Feria de la Vendimia, conciertos de colectivos locales o la Noche en Blanco.
Bien de Interés Cultural desde el año 1985, a lo largo de su historia se han hecho varias reparaciones en el edificio hasta llegar a uno reciente, bajo proyecto de Juan Cuenca, desarrollado con el objetivo de convertirlo en sede del Museo de Vinos de Andalucía, habiéndose inaugurado ya en 2017 una Oficina permanente de Información y Turismo en él.
Foto: Cordobapedia (Wikimedia Commons)
Bibliografía:
* Guía digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico.