El Castillo de Santa Olalla del Cala fue mandado construir por Sancho IV El Bravo en el año 1293 mediante Cédula Real firmado en la ciudad de Toro el 4 de noviembre. Su construcción, coetánea con el castillo de Cumbre Mayores, supuso la consolidación de una histórica línea defensiva de fronteras en las estribaciones occidentales de Sierra Morena, que fue conocida como “la Banda Gallega”.
Fue levantado en plena época de revueltas sobre la conocida “cuestión del Algarbe”, y reforzado más adelante en distintas ocasiones: entre 1386 y 1387 a causa de las invasiones territoriales de las Órdenes Militares por Extremadura y la histórica pugna fronteriza hispano-lusa; entre 1466 y 1467 debido a la inestabilidad política del Reino de Sevilla y la guerra civil entre Enrique IV y el infante Alfonso en Castilla. O con motivo de los constantes ataques de malhechores que en la Baja Edad Media deambulaban por la sierra asaltando propiedades y castillos.
Atravesada por la Vía de la Plata, tradicional ruta de comunicación Norte-Sur y de trasiego de mercancías, minerales y ganados, el sitio de Santa Olalla representaba un hito milenario de dominio, asentamiento y defensa del territorio, que se prolongaría hasta la época de la invasión francesa, cuando un Regimiento de la Infantería de Marina lo ocupó en 1809 para defender esta vía de penetración en Andalucía.
Ya en el siglo XIX y principios del XX, el castillo fue usado como Cementerio Municipal, lo que fue debilitando mucho su estructura a causa de los huecos creados en sus muros para la apertura de nichos, un uso que fue clausurado en 1917 entrando a partir de entonces en un período de abandono y expolios continuos que darían lugar a su ruina, llegando a desplomarse su Torre y parte de la muralla a finales de dicho siglo
De estilo gótico-mudéjar con caracteres almohades, presenta planta rectangular con un recinto amurallado de 135 x 54 m, con un espesor medio de 2,30m. La muralla conserva almenas y parapetos y cuenta con diez torres almenadas en las que aún pueden observarse saeteras. Destaca la torre central del lado Este, que defiende su entrada principal con una disposición en codo que obliga a forzar la entrada al castillo por un pasillo lateral, dificultando así su acceso desde el exterior.
Bien de Interés Cultural inscrito en el BOE desde el año 1985, el castillo ha sido restaurado posteriormente a esta fecha, volviendo a presentar de nuevo su imponente imagen de guardián de las tierras de su entorno y del pueblo de Santa Olalla, que se extiende en suave pendiente a sus pies.
Foto: Carlos Ruiz Serrano
Bibliografía:
*Paneles informativos de la Junta de Andalucía existentes al pie del propio castillo.
* Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico