Una de las zonas más emblemáticas de la ciudad de Jaén es sin duda su Barrio de la Magdalena, un enclave único que representa la esencia misma de la ciudad; testimonio vivo de su historia, sus tradiciones y sus vivencias afianzadas con fuerza con el paso de los siglos.
Sus calles y plazas, de profundas raíces islámicas y cristianas, han sido testigo del paso de culturas y leyendas que aún hoy se manifiestan en su trazado urbano y en su rico patrimonio.
El origen de este barrio asciende a la época medieval, cuando el Manantial de la Magdalena fue esencial para el abastecimiento de agua de la ciudad, pues cerca de él creció uno de sus primeros núcleos habitados donde según la tradición Abderramán II levantó la mezquita aljama -o principal- tras hacer de Yayyan (Jaén) la capital de su cora en el siglo VIII.
Entre los lugares principales del barrio están la plaza y la Iglesia de la Magdalena frente a las que se encuentra el célebre Manantial o Raudal de la Malena, conocido desde época romana y concebido entonces como un ninfeo o santuario dedicado al culto al agua.
La importancia patrimonial de este raudal es tal que está declarado Bien de Interés Cultural y catalogado por la Unesco Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, quedando ligado además a una de las leyendas más populares de la ciudad, enriquecida con aportaciones de los distintos pueblos que la ocuparon a lo largo de su historia y transmitida por generaciones primero por vía oral y a partir del s. XVII también por distintas versiones literarias.
Se trata de la conocida leyenda del lagarto, “el Lagarto de la Malena”, que en esencia narra la existencia de un lagarto que vivía en el venero de la Magdalena y tenía atemorizada a la población.
A partir de ahí la leyenda sigue con versiones distintas; una cuenta que un pastor acabó con su vida, cansado de que se comiera los corderos del lugar, colocando como cebo una piel de cordero con explosivos, que le explotó en la barriga cuando el lagarto lo comió; otra habla de un preso que mató al lagarto al ofrecerse a hacerlo a cambio de su libertad, usando panes con explosivos en su interior haciendo que el dragón lo comiera y lo siguiera hasta la plaza de San Ildefonso, donde explotó.
El enorme arraigo de esta leyenda en Jaén hizo que la ciudad se animara a presentarla ante el Bureau Internacional de Capitales Culturales, que en 2009 inició una campaña para elegir los “10 Tesoros del Patrimonio Inmaterial de España” para promover su protección y divulgación.
Su candidatura fue elegida y por ello el Ayuntamiento de la ciudad declaró el día 2 de julio “Día del Lagarto de la Malena”, fiesta que se celebra con la participación de varios colectivos en la recreación de la leyenda y su escenificación, popularizando también una bebida, la “Sangre de lagarto”, con anís entre sus ingredientes.
Además, el Lagarto de Jaén, de enorme popularidad en la ciudad y cuya figura aparece representada en el barrio (en la imagen), ha dado nombre a su Festival Lagarto Rock que se celebra en el mes de junio en las fiestas de la Virgen de la Capilla, patrona de la ciudad, y a las populares expresiones: “Así revientes como el lagarto de Jaén”, usada para maldecir, o “Reventar como el lagarto de La Malena”, dicho tradicional para alguien que come en exceso.
Foto: Kordas (Wikimedia Commons)
Bibliografía;
. El barrio de la Magdalena (Jaén): un viaje por el corazón histórico de mi ciudad.- en: https://dejaenjaen.com/barrio-de-la-magdalena-jaen/
. La Magdalena: el barrio jiennense que debe su nombre a una santa y a una leyenda.- Jaén Hoy, 25 de julio de 2025, en: https://www.jaenhoy.es/jaen/magdalena-barrio-jiennense-debe-nombre-santa-leyenda-lagarto_0_2004421802.html
. Leyenda del lagarto de la Magdalena.- Guía digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, en: https://guiadigital.iaph.es/bien/inmaterial/238629/jaen/jaen/leyenda-del-lagarto-de-la-magdalena
