Baños de la Encina es una localidad jiennense que se encuentra situada en la Comarca de Sierra Morena, en la zona norte de la provincia.
Con una población de pequeña entidad, que en el año 2022 rondaba los 2.600 habitantes, su patrimonio monumental es enorme, ya que cuenta con uno de los mejores castillos de Andalucía y de España: una impresionante fortaleza por suerte con su recinto exterior muy bien conservado, que da idea de la gran importancia de su pasado.
La localidad se ubica en las estribaciones de Sierra Morena, y su denominación coincide con la del castillo de Burgalimar -Bury al Hamma-, que significa “castillo de los Baños”; el sobrenombre de “La Encina” le fue añadido en memoria de una tradición según la cual la Virgen se apareció sobre una encina que aún se conserva.
Su núcleo urbano se muestra sobre un cerro junto al castillo, que se puede ver desde una amplia extensión de terreno, quedando la fortaleza en su extremo occidental al borde del mismo donde la ladera comienza su fuerte descenso hacia el llano. Su posición estratégica permite ver en primer término las huertas, olivares y tierras llanas, y en la lejanía las Sierras de Cazorla y Mágina, al sur las de Jaén, Alcalá y Priego, y al norte y oeste la de Sierra Morena.
El castillo fue conquistado en 1147 por Alfonso VII, pasando de nuevo a poder islámico en 1157. En 1189 la fortaleza fue tomada por las tropas de Alfonso VIII de Castilla y Alfonso IX de León, siendo recuperada otra vez por los almohades en 1212 en su camino a la batalla de las Navas de Tolosa, manteniéndose en su poder hasta su toma definitiva por Fernando III el Santo en el año 1225.
Tras la reconquista cristiana los castellanos le añadieron algunos elementos, como una Torre del Homenaje que vino a sustituir al torreón original más oriental, y una división interior que vino a definir parte del recinto para un alcázar. La torre del Homenaje, llamada popularmente Almena Gorda, es de planta rectangular realizada en cantería. Su alzado consta de dos plantas, en la última de las cuales se trasdosa una azotea, existiendo en ella saeteras y tres barbacanas; se trata de una reconstrucción de la misma época que el torreón circular que refuerza la división del alcazarejo, hoy desmochado. El castillo tuvo además un antemuro que todavía circundaba la muralla en el año 1645, hoy desaparecido salvo los vestigios que puedan conservarse en el interior de las casas de la población, en la calle de Santa María.
Bien de Interés Cultural desde el año 1931, el castillo presenta en total quince torres, catorce de planta cuadrada y cubierta de bóveda de cañón realizadas en tapial, coronadas con merlones realizados en hormigón en los años 70 del siglo XX; al interior sus caras presentan huecos rectangulares superpuestos, los inferiores a nivel del suelo y los superiores a un nivel del camino de ronda; interiormente están huecos y sobre su cubierta existe trasdosada una azotea.
Foto: Veinticuatro de Jahén (Wikimedia Commons).
Bibliografía:
* Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico