Padul , también conocido como “El Padul”, es una localidad granadina que se encuentra situada en la Comarca del Valle de Lecrín, hacia el centro de la provincia, limitando con otras comarcas de la misma, como La Vega de Granada al norte, la Alpujarra Granadina al este, la Costa Granadina al sur y la Comarca de Alhama al oeste.
En el centro de la población se halla el Castillo-Palacio de los condes de Padul, también denominado “Casa Grande”, o simplemente “el Castillo”, un antiguo palacio del siglo XVI de carácter civil edificado sobre las ruinas de una anterior casa-fuerte, probablemente con características de fortaleza.
La arquitectura de este castillo-palacio es de tipo barroco, muy austero y sin alardes ornamentales; un magnífico edificio que resulta muy atractivo por sus elegantes proporciones, su sencillo juego de volúmenes a distinto nivel y la vistosidad de sus remates puntiagudos de fachada. Además de su innegable valor histórico y artístico, este edificio constituye uno de los pocos y raros palacios de este estilo que se conservan en Granada y su provincia, y como curiosidad, cuenta en uno de sus frentes con una placa donde se describe la defensa realizada aquí por Martín Pérez de Aróstegui, originario de Guipúzcoa, en el año 1569, cuando la defendió frente a turcos, moros y moriscos cuando la sublevación de éstos últimos, siendo reedificada posteriormente por su hijo, Antonio de Aróstegui, secretario del rey Felipe III, en el año 1613.
El edificio se sitúa en el interior de un gran espacio casi cuadrado, cercado por un muro y con acceso a través de un gran portón; una vez en su interior, el castillo-palacio propiamente dicho se ubica en el sector sur-oeste del recinto, también de forma sensiblemente cuadrangular. Una vez pasada la puerta se llega a un amplio zaguán con salida trasera a un patio de menor superficie y con bancos alrededor para los pobres que pedían comida, lo que hace que este edificio forme parte del raro y peculiar catálogo de “palacios de Asiento” existentes en la provincia de Granada.
Al patio de mayor superficie, que ocupa todo el ala sur, se llega desde el patio pequeño, estando sus tres muros de cierre coronados por un vistoso almenado de pináculos piramidales; en sus esquinas se sitúan dos torres circulares huecas de construcción reciente, que sustituyen a las originales quedaron derruidas tras el terremoto de Andalucía del año 1884.
Bien de Interés Cultural desde el año 1981, su restauración se comenzó en el año 1984, siendo costeada por su entonces propietario, don José María Pérez de Herraste y Narváez, en una intervención que supuso el arreglo del muro de la cerca exterior y la demolición de recientes edificios añadidos, entre otros, además de la limpieza general del conjunto, quedando éste finalmente abierto a visitas durante los lunes por la mañana.
Foto: Jadelmo (Wikipedia Commons)
Bibliografía:
* Guía Digital del Patrimonio Cultural de Andalucía. Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico